La Demoscene es una subcultura informática y artística que surgió principalmente durante los años 80 en Europa, vinculada estrechamente a ordenadores domésticos como el Commodore 64, Amiga, Atari ST o PC. Los integrantes de esta escena, conocidos como demosceners, producen demos: piezas audiovisuales no interactivas diseñadas para demostrar habilidades técnicas y creativas, exprimiendo al máximo las capacidades del hardware disponible, frecuentemente limitado.
Originalmente, estas demos eran intros añadidas en videojuegos piratas por grupos de crackers para mostrar su talento. Con el tiempo, la Demoscene se independizó, enfocándose exclusivamente en la creación artística, técnica y musical. Eventos como las «demoparties» reúnen a artistas, programadores y músicos para exhibir sus creaciones en tiempo real y competir en distintas categorías. Las demos, además de su valor artístico, han influenciado fuertemente la estética y música chiptune y pixel art que hoy día son tan valoradas en el mundo retro. La Demoscene sigue viva actualmente, preservando una cultura que combina talento técnico, espíritu competitivo y nostalgia tecnológica.